El 11 de abril la Organización Mundial de la Salud declaró esa fecha como el Día Mundial del Parkinson en conmemoración al nacimiento James Parkinson, el neurólogo británico que en 1817 describió lo que denominó “parálisis agitante” y que hoy se conoce como enfermedad de Parkinson. Cada año se proponen instancias de concientización sobre la problemática.

Sobre ese contexto, se realizarán una serie de charlas gratuitas sobre la enfermedad para pacientes, familiares y público en general en el Hospital de la UNCuyo. Al respecto el médico neurólogo Sebastían Rauek hablará sobre sus características y tratamientos, la kinesiologa, Mariana Cerdán, abordará la rehabilitación de los pacientes y la trabajadora social, Cecilia Torres, explicará los distintos programas que ofrece el Centro Asistencial.

El encuentro será el miércoles 11 de abril, de 10 a 12, en el aula 2 del Hospital, Paso de los Andes 3051 de Ciudad. La entrada es gratuita y no  requiere inscripción previa.

Parkinson

Se trata de un trastorno neurológico que pertenece a un grupo de condiciones caracterizadas principalmente por dificultades en el movimiento corporal. Se produce por la pérdida progresiva de células nerviosas localizadas en una región del tronco cerebral llamado mesencéfalo. Estas células se encargan de fabricar dopamina, una sustancia que  permite la transmisión de impulsos de unas células nerviosas a otras y es necesaria para el adecuado funcionamiento motor.

Es una patología directamente relacionada con la edad. Se estima que su prevalencia es de uno de cada 100 personas mayores de 60 y llega a manifestarse en 4 cada 100 personas mayores de 80 años. Se presenta con lentitud en los movimientos, temblor de reposo y rigidez muscular en miembros o tronco. La persona nota dificultad para caminar con escaso movimiento de los brazos y arrastre de los pies, dificultades para darse vuelta en la cama, entrar o salir del auto, en la escritura, temblor en las manos,  piernas o mentón. Sus familiares refieren falta de expresión en la cara y bajo tono en la voz entre otras cosas. 

Además de los síntomas de origen motor pueden manifestar dolor en miembros, estreñimiento, problemas en el sueño, trastornos del ánimo con síntomas depresivos, lentitud en el pensamiento y en estadios más avanzados alteraciones de la memoria y la conducta. El neurólogo deberá realizar un adecuado interrogatorio y examen clínico para llegar al diagnóstico.

El adecuado tratamiento depende del abordaje interdisciplinario entre incluyen neurólogos, médicos clínicos, geriatras, urólogos, psiquiatras, gastroenterólogos, fonoaudiólogos, kinesiólogos, terapistas ocupacionales, nutricionistas, enfermeros, asistentes sociales, entre otras disciplinas.

Se la considera una enfermedad neurodegenerativa. Si bien hasta el momento no contamos con un tratamiento curativo, el arsenal terapéutico del que disponemos permite una vida plena, prácticamente normal, durante muchos años en la mayoría de los pacientes. Por otro lado, los avances constantes en investigación científica permiten esperar en un futuro terapias cada vez más efectivas.