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La biblioteca personal de Arturo Roig tendrá su espacio en la UNCUYO

El archivo y fondo bibliográfico del filósofo mendocino se trasladó íntegramente desde su casa en Ciudad a la Biblioteca Central. La colección personal con miles de ejemplares se inaugurará el martes 24 de noviembre a 11.

23 de noviembre de 2015, 09:46.

imagen La biblioteca personal de Arturo Roig tendrá su espacio en la UNCUYO

Los libros del intelectual mendocino estarán alojados en la Biblioteca Central de la UNCUYO.

La biblioteca personal de Arturo Andrés Roig - archivo y fondo bibliográfico ahora podrá consultarse en una sala especial en la Biblioteca Central de la UNCUYO. Los miles de ejemplares que la componen se trasladaron íntegramente desde su casa en la Ciudad de Mendoza.

La colección está ubicada en un espacio vidriado especial, separado de las estanterías de la Biblioteca Central, y los usuarios podrán acceder al material exclusivamente en esa sala.

En el armado de la biblioteca personal se respetó el orden y la distribución que Don Arturo dispuso para su colección de libros y revistas sobre filosofía, historia, literatura y otros temas que eran de su interés, con especial orientación al pensamiento argentino y latinoamericano. Se encuentran también libros y publicaciones de su autoría, manuscritos y trabajos en versión original. Además se procuró recrear el espacio de estudio y trabajo del filósofo en un escritorio con sus artículos y objetos personales.

La biblioteca se inaugurará el martes 24 de noviembre a las 11. Participarán el rector Daniel Pizzi, la secretaria académica Adriana García, familiares y amigos de Roig y miembros de la comunidad académica e intelectual.

Roig y la UNCUYO

Desde el 2012 la Biblioteca Central lleva su nombre como reconocimiento a la extensa trayectoria académica del intelectual mendocino y su particular devoción por los libros y las bibliotecas.

Algunos meses después de su fallecimiento, la familia donó la biblioteca que Don Arturo formó en su casa de calle Vicente López de la Ciudad de Mendoza. A partir de ese momento personal bibliotecario del Sistema Integrado de Documentación (SID) realizó el trabajo de mudanza y catalogación de los ejemplares, con cuidado, respeto y profesionalismo.

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