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Ante miles de espectadores Eduardo Galeano cerró su visita en Mendoza

En una charla-debate, el escritor uruguayo relató escritos inéditos ante unas 3500 personas. La actividad, realizada en la Nave Cultural, fue coordinada por la Secretaría de Extensión Universitaria en el marco del ciclo la UNCuyo en el Debate Social.

30 de marzo de 2011, 13:50.

imagen Ante miles de espectadores Eduardo Galeano cerró su visita en Mendoza

Eduardo Galeano visitó por primera vez la Provincia para llevar adelante diversas actividades, entre las que se destacaron la entrega del Doctor Honoris Causa y la charla-debate aventuras y desventuras del oficio de escribir.

En su paso por Mendoza, deja inmemorables relatos. Pero también dejó su percepcion sobre esta tierra y su gente. En una conversación con Universidad en ContEXTo comentó que "mi madre y mis tíos vivieron aquí un tiempo. Tenían de su infancia mendocina imágenes grabadas para siempre en la memoria". Siempre le transmitían a la provincia "como paraíso terrenal, como el lugar más bellos del mundo". Y agregó, "no sabía si eso era verdad o era la capacidad que tiene la memoria de dar magia a todo lo que toca. Yo desconfiaba de los relatos, pero Mendoza es tan bella como ellos decían". Además, "desde que pisé esta tierra sentí que es muy entrañable y capaz de dar amor. Y eso no se miente, es una electricidad que se no palabrea porque existe o no existe, se daba o no se daba. Pero yo senti que se dio desde el comienzo".

Las actividades finalizaron con una charla debate en la que el destacado referente de la cultura popular latinoamericana relató, durante poco más de una hora, las aventuras y desventuras del oficio de escribir. Se trató de textos inéditos que el escritor publicará en su próximo libro.

Cerca de 1500 personas en la sala principal de la Nave y más de 2000 por medio de una pantalla afuera del salón, siguieron las narraciones sobre diversos temas que Galeano abordó con su particular perspectiva. Se destacaron los relatos sobre las dictaduras, las guerrillas y el fútbol, entre otros. Los mendocinos tuvieron el gusto de oír las anécdotas personales que ha vivido en sus 71 años de vida.

Al respecto, se definió como “un caminante caminado” y añadió “las palabras caminan dentro de mi y los libros me escriben mientras caminando voy”. Y agregó “escribí sobre futbol para la conversión de los paganos, para que los fanáticos de la lectura le pierdan el miedo al futbol y que los fanáticos del futbol le pierdan el miedo a los libros”. Con respecto a sus inicios como escritor, confesó que lo es porque "soy un inútil total. Intenté otras vocaciones pero nada salió bien. Por ello, decidí probar con las palabras" .  A pesar de todo, aún "sigo sintiendo, como el primer día, ese temblor frente a la hoja en blanco. Lo cual prueba que todavía no estoy en edad de jubilarme, indica como que estoy dispuesto, como la primera vez, a enfretarme a ese desafio que consiste en encontrar las palab que sean capaces de decir lo que uno siente, piensa..lo que uno sentipiensa".

Asimismo, aseveró que el periodismo escrito es una forma de literatura, y la definió como "el conjunto de expresioners escritas que una sociedad emite y genera, tenga la forma de un artículo, de libro, de folleto, sea una hoja perdida o hasta un graffiti". "Creo que detrás de todo el que escribe y publica hay una intención de comunicación con otro, y eso implica una responsabilidad muy grande. Por ello, hay que creer en lo que se dice,  hay que ser honesto, no alquilarse ni venderse".

Durante la exposición, el auditorio acompañó el relato del uruguayo con atención y recorrieron imaginariamente junto a él, todos y cada uno de los paisajes y situaciones que Galeano dibujaba.

En su relato, recordó el primer desafío serio que tuvo como escritor, que surgió cuando estuvo en las minas de Bolivia. Uno de los mineros con los que convivió un tiempo le dijo, minutos antes de ingresar en el socavón, “ahora, hermanito, dinos cómo es el mar”. Galeano sabía que ninguno de ellos iba a conocer el mar porque “iban a morir temprano con los pulmones hecho cartón por el silicio. Yo tenía que contarles el mar de tal manera que lo llevara allí. Y la verdad es que no sé si estuve a la altura de aquel desafío. Ojalá que si, ojalá que yo haya encontrado palabras capaces de mojarlos... capaces de mojarlos... capaces de mojarlos”

Una vez finalizada la charla, el escritor uruguayo respondió algunas preguntas del público que se centraron en  4 ejes: el medioambiente y el futuro, la Utopía y el hombre, el fútbol y el futuro de Latinoamérica.

Respecto del primer eje, Galeano destacó que es muy valorable que haya gente “que heroicamente se resiste a este divorcio, para el que hemos sido entrenados, entre la naturaleza y las personas”. Por ello, celebró lo sucedido en Bolivia y Ecuador, “dos países despreciados por los grandes medios internacionales de comunicación”, que sancionaron “constituciones que reconocen los derechos de la naturaleza”. “No por nada dediqué esta ofrenda generosa que me dio la UNCuyo a los militantes del agua”, agregó.

Galeano refrescó uno de los relatos más memorables de su extensa producción literaria. Con voz baja afirmó que “en los seres humanos es imprescindible tener la capacidad de ver más allá de las infamias del presente para adivinar ese otro mundo -la utopía- que está en la barriga de este mundo y que espera que lo ayudemos a nacer”. Asimismo, citó al cineasta argentino Fernando Birri quien, ante la pregunta ¿Para que sirve la utopía?, respondió que “ella está en el horizonte, y si avanzo diez pasos en su búsqueda, ella se va correr diez pasos. Entonces, yo sé que nunca la alcanzaré. Y para eso sirve… para caminar”.

Sobre el fútbol, comentó que “en Uruguay los bebés nacen diciendo gol y es un certificado de identidad y yo siempre jugué maravillosamente bien al fútbol pero de noche, mientras dormía. De hecho, jugaba mejor que Maradona o Messi, pero después venía el despertar, el sol de la mañana lastimándome los ojos y la verdad es que siempre fui pata de palo”. Y añadió que “no tuve más remedio que escribir un libro para tratar de hacer con la mano lo que no pude hacer con los pies”. Aseveró que el fútbol sigue siendo capaz de expresar “una linda fiesta a las piernas que lo juegan y a los ojos que lo miran” y concluyó afirmando que es un espejo de la vida.

Por último, reflexionó sobre América Latina y los fenómenos que está viviendo y sostuvo que “debemos negarnos a repetir la historia para ser capaces de hacerla de nuevo,  inventar el futuro en lugar de aceptarlo”. Agregó que esto está ocurriendo en diversos países a diferentes tiempos, esta diversidad es  “lo mejor que tenemos, es la prueba viva de que no estamos condenados a morirnos de hambre ni tampoco a morir de aburrimiento”.

 

Su visita por Mendoza

Eduardo Galeano arribó a la Provincia el lunes 21 de marzo para participar de una serie de actividades coordinadas por la Secretaría de Extensión Universitaria. Las mismas comenzaron ese mismo día con una conferencia de prensa. En la oportunidad el uruguayo dialogó con los medios sobre ecología, medios de comunicación, literatura, política y América Latina.

Las actividades continuaron al día siguiente, martes 22, la UNCuyo reconoció a Galeano con el Doctor Honoris Causa. El escritor dedicó la máxima distinción universitaria a los militantes del agua, “que son capaces de enfrentar  no solo a las empresas mineras y a la industrias forestales que seca la tierra, sino también a todos los que cometen una imperdonable traición al planeta como es comercializar el agua que es un derecho de todos”. Asimismo, esa tarde firmó más de 150 libros en el Teatro Universidad.

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