Una mirada integral
Capelli contó que la Dirección de Salud Estudiantil se hicieron eco de las repercusiones que estaba teniendo el tema del juego online entre los jóvenes y vieron la necesidad de un abordaje integral que considerara diferentes variables.
"Nos preocupaba el modo en que la problemática de los juegos de apuesta en línea comenzaba a instalarse en los medios y en la sociedad, vinculada de manera casi automática, lineal con padecimientos psicopatológicos. En muchos casos, se hablaba directamente de “ludopatía” sin contar con evidencia suficiente para sostener afirmaciones tan contundentes".
Capelli apuntó a la necesidad de visibilizar una mirada más compleja sobre los consumos problemáticos. "Entendemos que hay múltiples causas que inciden, y que no toda relación con un objeto de consumo —en este caso, plataformas de apuestas on line— es necesariamente una relación problemática. Indagar el tipo de vínculo que establecen las personas con estos consumos resulta clave para no reducir el análisis a etiquetas diagnósticas simplificadas", detalló.
Los principales resultados
Con un enfoque preventivo, social y no patologizante, el estudio relevó la experiencia de más de 1.000 estudiantes de distintas unidades académicas. Se abordaron las motivaciones, prácticas y percepciones que tienen respecto a los juegos de azar.
Entre los principales hallazgos, se destaca que el 63% de quienes participaron reconoció haber jugado al menos una vez, aunque solo un 2% lo hace con una frecuencia que podría ser considerada problemática.
Contrario a lo que suele pensarse, la motivación principal no es el dinero, sino la diversión, la curiosidad o el deseo de nuevas experiencias. Además, la mayoría de encuestados manifestó una mirada crítica frente a estas prácticas.