Una investigación local da sus primeros pasos en el desarrollo de un alimento funcional a base de extractos de subproductos de la industria del ajo, el tomate, la uva y el oliva, que contengan compuestos bioactivos con propiedades antitumorales. Destacan su fácil accesibilidad, alta eficacia y bajo costo como estrategia sanitaria.
Son ensayos realizados por investigadores de la UNCuyo y del INTA. A partir de pruebas en conejos, los mejores resultados se lograron con chala de ajo y orujo de tomate. Buscan reducir costos en la alimentación animal y evitar la contaminación ambiental que generan esos productos.