Podemos separar las instancias de prevención ante un sismo, en tres momentos:
1. Antes del sismo: preparación y prevención
- Identificar las vías de evacuación y las zonas seguras dentro de cada facultad o instituto.
- Evitar ubicar objetos pesados en altura o que bloqueen pasillos.
- Asegurar estanterías y mobiliario a paredes o estructuras fijas.
- Reconocer a las y los brigadistas, quienes liderarán las acciones durante una evacuación.
- Participar activamente en los simulacros institucionales.
2. Durante el sismo: mantener la calma y protegerse
- Mantener la calma.
- Agacharse, cubrirse y sujetarse debajo de un escritorio o mesa firme.
- Adoptar la posición de seguridad lateral si no se cuenta con resguardo.
3. Después del sismo: actuar con responsabilidad
- Evacuar solo cuando finalice el movimiento sísmico, siguiendo las rutas establecidas.
- Dirigirse a los puntos de encuentro y evitar ascensores o escaleras internas.
- Seguir las indicaciones del personal brigadista.
- No encender fósforos o encendedores ante posibles fugas de gas.
- No reingresar al edificio hasta que lo autoricen las autoridades competentes.
El rol clave de los brigadistas
El personal brigadista está capacitado para asistir, coordinar y orientar durante cada etapa del evento sísmico. Con roles definidos y formación continua, son figuras esenciales para garantizar la seguridad de la comunidad universitaria.