06/J242
Conducta agresiva y adictiva: abordaje psicoendócrino-inmunológico e investigación de los péptidos cart (cocaine-anphetamine-regulate-trascript), en humanos
Director: BIANCHI, Antonio Ricardo
Correo electrónico: bianchidoc@yahoo.com.ar
Co-Director: GUTIERREZ, Benigno
Integrantes: LLINAS CARRILLO, Sergio; CHADE, Humberto; DÍAZ de DRAGOTTA, Marta; BISCARO de MASSA, Amalia; PONCE, Clara Delia; ABUD, Maria Angélica; FERNANDEZ, Sergio; CABALLERO MORENO, Antonio; NANFARO, Federico
Resumen Técnico: Los términos de violencia y agresión se asocian a un conjunto de actos físicos o psicológicos ejercidos por los individuos a otros o a sí mismos (autoagresión suicida) con la finalidad de producir daño corporal o psicológico. Estos actos agresivos pueden asociarse también en un contexto de ira o miedo. Algunos autores excluyen aquellos actos que resultan de la planificación bajo el contexto del comportamiento criminal y premeditado.(Man, 1995).Es conocido que el desarrollo de un comportamiento violento y agresivo es multifactorial y multicausal. Entre los diversos factores, sociales económicos o culturales, no pueden descartarse los factores psicológicos y comportamentales y la influencia de factores neuroendócrinos que pueden transformar a sujetos sanos en sujetos portadores de verdaderas psicopatologías ( Monahan ,1992).( Ver bibliografía Proyecto 06/197-periodo 2004-2006) En el presente plan se pretende investigar puntualmente la influencia de los sistemas psicológicos, neuroendócrinos, inmunológicos y moleculares, en humanos. particularmente la relación de la conducta agresiva con el consumo de drogas de abuso, incluido el alcohol. Se incluye en la actual presentación la investigación del péptido CART como un abordaje molecular a este tipo de trastornos. Actualmente no existe en la provincia un proyecto que oriente al estudio de las causas biológicas que permitan explicar en profundidad y desde una óptica molecular las bases de la conducta adictiva. Se cuantificarán los niveles MAO y 5-HT en plaquetas ( Young y Brown 1989) en una población de adictos( se intentará, en la medida de lo posible precisar la adicción, en general pueden ser poliadictos). 40 en total. En este grupo se subdividirán en :depresivos (depresión mayor) y trastornos de personalidad (conducta heteroagresiva) y 40 controles. Las edades promedio de la población en estudio será de 15 a 25 años. Dependiendo de las disponibilidades de algunos pacientes y del personal a ser estudiado, en algunos casos se estudiarán ritmos biológicos( Extracciones a las 8,00, 12,00 16,00 ,20 y 24 horas.) Es de hacer notar las dificultades que se presentan cuando se trabaja en ritmos con humanos. A las determinaciones hormonales de Prolactina, Cortisol, ACTH, DHEA(s) e inmunoglobulinas ( IgG, IgA e IgM), trabajo de rutina en nuestro laboratorio, se incluirán las cuantificaciones de los niveles de CART sérico por RIA. La inmunoplaca es pretratada con un anticuerpo secundario y los sitios no específicos son bloqueados.El anticuerpo secundario se une al fragmento Fc del Ac primario los cuales pueden ser pegados por ambos péptidos biotinilados. Estos pueden interactuar con “streptavidin-horseradish-peroxidase” que catalizan el sustrato de tetrametilbenzidina y peróxido de hidrógeno para producir una coloración azul. La reacción se detiene por el agregado de HCL y la coloración amarilla es directamente proporcional a la cantidad de péptidos biotinilados.( Se adjunta técnica de Phoenix Pharmaceuticals Inc® rango de 0-100 ng/ml).( Porstmann ,1992) Paralelamente a las pruebas neuroendócrinas descriptas se realizarán los tests de Hamilton, Rorschachr y Bender. ( Ansiedad, depresión y trastornos de personalidad.)( Ver citas). Los resultados obtenidos permitirán aclarar la participación del eje neuroendócrino e inmunológico- molecular en el diagnóstico, pronóstico y tratamiento de la conducta agresiva y adictiva en humanos. Esperamos, con toda modestia y humildad, poder ofrecer al menos en parte, algunas explicaciones respecto a lo que fuera solicitado por la Asamblea Extraordinaria de Naciones Unidas(Nueva York, Junio 1998) fijando el 2008 para observar los efectos de todas las estratégias orientadas a combatir este verdadero flagelo.” Se hace necesario analizar cientificamente ante qué nos enfrentamos, sin las rigideces propias de las pseudociencias, sí con el laboratorio como órgano rector, con las bases más sólidas de las ciencias básicas, con datos que superen las opiniones imaginativas y nos den el conocimiento sereno de ¿ Qué, porqué, quién y dónde hace daño la droga ¿”( Lorenzo, 1998).